Ya hemos visto las historias de Alfonso Dominguez y del Tigre Sorrel, pero el primer gran delantero de Colo Colo fue Guillermo Subiabre, dalentero de potente remates, definidor y de buen juego aéreo, el emblema del equipo después de la perdida de David Arellano.
Nació el 25 de febrero de 1903 en Rio Negro, Osorno. De esa ciudad llego a Wanderern de Valparaiso, fue breve su paso por el club debido a que en 1926 reforzó a Colo Colo en su gira por Europa. Subiabre respondió a la exigencia con buenas actuaciones y goles.
Participo en el primer mundial de futbol disputado en Uruguay, marcando 4 goles y derribando a Luis Monti, un Argentino que lo superaba en altura y peso.
En el contexto amateur Subiabre triunfo en Colo Colo en la Liga Central de futbol de Santiago en 1928 y 1929 y en la asociación de futbol de Santiago en 1930.
De modo profesional solo jugó 2 temporadas en 1934 marcando 4 goles, año donde es reconocido como jugador "honorario vitalicio de Colo Colo".
Guillermo Subiabre se preocupo de la creación del mausoleo de los viejos cracks en el cementerio general de Santiago, donde se encuentra Jorge Robledo, Gullermo Saavedra, Francisco Arellano y su hermano, David, que fue repatriado de España. Obviamente Subiabre también descansa ahí luego de fallecer en 1964.
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